Buenas compañeros/as, vamos a introducir en el blog un bloque de contenidos centrado en una de las problemáticas más frecuentes que se dan en el profesorado que atendemos a través de nuestro servicio del Defensor del Profesor, el Síndrome del Quemado o Burnout.
Empezaremos hoy hablando de qué es el estrés, el estrés docente y el síndrome del "profesor quemado".
¿Qué
es el estrés?
El estrés es un fenómeno individual y subjetivo (vivido
por la persona afectada) que puede darse en cualquier persona que se encuentre
o se sienta sometida a una cierta presión.
Para el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el
Trabajo, el estrés laboral es desde una perspectiva integradora, “la respuesta
fisiológica, psicológica y de comportamiento de un individuo que intenta
adaptarse y ajustarse a presiones internas y externas”. Entonces, el estrés
laboral es lo que aparece cuando se presenta un desajuste entre la persona, el
puesto de trabajo y la propia organización a la que pertenece.
Los desencadenantes específico del estrés laboral están
ligados al desempeño de una profesión, en nuestro caso, a la profesión docente.
El
estrés docente
Según la Sociedad Española para el estudio de la Ansiedad
y el Estrés (SEAS), la docencia se encuentra en estos momentos entre las seis
profesiones más estresantes.
El estrés docente es una excesiva activación física y
psicológica relacionada con el esfuerzo para enfrentar las demandas de los
centros educativos y que cuando se cronifica perjudica seriamente la salud
de los profesores. Los expertos lo han nombrado con el anglicismo “burn-out”,
o síndrome del “profesor quemado”.
Pero, ¿cómo se ha llegado a la situación actual? La
respuesta no es sencilla. Habría que decir que hoy en día, muchos compañeros/as
tienen dificultades para controlar la conducta de sus alumnos/as en el
aula y para dar su asignatura a aquellos que quieren recibirla, y lo más
grave es que carecen de las herramientas necesarias para lograrlo. Cada vez es
más frecuente encontrar noticias en la que los profesores han sido amenazados e
incluso agredidos por alumnos, padre o madres.
Es un proceso que comienza, generalmente, como
consecuencia de la pérdida de ilusión profesional, a la que el profesor
responde aumentando su esfuerzo, y consecuentemente, su sensación de estrés se
incrementa. Aparece entonces irritación, tensión o miedo al aula e
incluso a los compañeros y los alumnos. El profesor o la profesora piensan
exageradamente sobre sus normales limitaciones y tienen miedo a que sus
dificultades sean percibidas por sus compañeros/as, a apelar a la dirección
para implantar disciplina, por ejemplo, etc.
El docente con “burnout” está afectado por problemas de
salud, desajustes psicológico, pérdida de autoestima y una creciente
insatisfacción por el trabajo.
Es una de las
principales causas de los problemas de salud mental en los profesores.
En nuestra próxima entrada trataremos de ver cuáles son algunos de los indicadores para saber si sufrimos dicho síndrome.
En nuestra próxima entrada trataremos de ver cuáles son algunos de los indicadores para saber si sufrimos dicho síndrome.